13 de marzo de 2012

16 veces

Y le avisa
16 veces le repite
que tenga cuidado al cruzar la calle
que los sueños que lo despiertan
no son 
la mayoría de las veces
los mas lindos.
Que el sonido 
de un instrumento musical
agitado por diestras manos
produce sibilantes sonidos,
hipnóticos,
atractivos,
narcóticos.
Que las variantes matemáticas
suelen aplicarse en la economía
y que no está mal que le gusten 
los días de lluvia.

Le comenta también
como al pasar y
susurrando
leve 
en su oído
que le gusta dormir 
entre las hojas 
y mojarse con el rocío matinal
porque despabila.
Se lo dice suave
mientras se aleja
y se pierde entre el verde pasto.

No alcanzó a ver su rostro,
criatura extraña.
Solo recuerda 
esos extraños consejos, 
dejados al pasar
en una siesta calurosa
y los recuerda siempre,
16 veces repetidos,
cada vez que comienza
a llover.

10 de marzo de 2012

La sombra que miro

Siento el ruido,                                                                      Crea la sombra que miro  
                                                                                  Y el sabor del mate en mi paladar
Produce saliva y sed.
Un paso y otro más,
El marco de la puerta cruje
Y sólo lo miro.
La luz en mi espalda    merece atención
Es como yo pero apagada, triste porque no existe.
A ella no le interesa porque no piensa, le alcanza con ser sombra.
Mi espalda también cruje pero sólo puedo verla en un espejo
Aunque forme parte de mi cuerpo.
Todo mientras escribo.

5 de marzo de 2012

Bancársela

Escuche lo que dicen
detrás de lo que dicen
con palabras,
nadie engaña,
no es paranoia.
Solo se malinterpretan
las señales.

No diga que nadie
le advirtió,
que nadie le previno
de las consecuencias.
Que le clavaron un puñal
por la espalda
o cuente después
una historia
digna de una milonga.

Y si quiere arriesgarse
¡hágalo hombre!
que para eso está vivo.
Lo único que le pido
es que se banque
lo que viene
y todo lo demás.
No joda
y hágase cargo:
es su RESPONSABILIDAD.